Como es tradicional el primer domingo
después de la feria nos desplazamos hasta el pueblo de
Tricio a casa de Eduardo y de
María a recoger tantas cerezas como podemos a lo largo de mañana.Salimos de
Vitoria con un cielo amenazador de lluvia pero bueno no nos mojamos,este aspecto tenia el cielo en el
balcón de la
Rioja.

Dicen en mi pueblo que los mirlos cuando entran en un cerezo o en una parra que comen una y se llevan otra en el pico,nosotros encontramos un
pájaro subido en el
árbol que nadie sabiamos a que raza
pertenecía, ya que este no dejaba de comer cerezas y echaba pocas al cubo,y encima se las lleva colgadas en la oreja.

Esta cuadrilla son los que arrasan los cerezos de Eduardo.

Mirar como corren porque se acerca la tormenta

Este es el peor rato que
están pasando y no me
estraña,
Menú elegido,chorizo al sarmiento,costilla asada,morcilla de Burgos al vino,presa ibérica a la brasa,y para Javier sardinillas asadas que por cierto estaban exquisitas,acompañada con una ensalada ilustrada y de postre brazo de jitano con pastas de Zamora traídas por María y rosquillas caseras y como colodión café y chupitos.

Parte de los socios de este club han hecho esta semana un viaje a Italia y han visitado varios museos de autos,nos
pondrán los dientes largos cuando
proximamente nos cuelguen unas
fotografías.